Todo esto sirvió para que dejaran volar es imaginación a través de los cuentos, también para volver a ser como esos chiquillos que no se duermen hasta que le relaten una historia.
En verdad que se vivió una fiesta literaria y lúdica que sembró esa semilla para que, a partir de ahora, todos se dediquen a la lectura.
Hoy estaremos en Santa Rosa de Osos (Antioquia) incentivando a los residentes de esta población a que se interesen por la lectura porque leer…es un cuento.